No era fácil salir indemne después del primer partido tras la tormenta, y de ahí el resultado. Desde luego que no es sencillo obtener resultado alguno con tantas idas y venidas, tanta lesión y tanto camino de allá para acá, hacer encajar las piezas… y, a pesar de todo, el San Roque de Lepe siempre dio la cara en la fría tarde jiennense, aunque no pudo evitar la segunda derrota consecutiva lejos del Ciudad de Lepe.
Había expectación por conocer los cambios tras la marcha de 6 jugadores y la llegada de otros tantos. Así, Luis Tevenet, en función del lógico aunque escaso trabajo de la semana con todo el grupo completo, resolvió llevar en la convocatoria a 5 de esos nuevos futbolistas, y siendo todos de la partida finalmente.
Ciertamente, fue un partido marcado por la igualdad y por la escasez de oportunidades por uno y otro lado. Siempre existió el respeto del uno por el otro, de modo que el espectáculo no resultó demasiado vistoso para el espectador del choque. De hecho, durante la primera mitad apenas se vieron ocasiones de peligro. Cabe reseñar una primera acción del Real Jaén cuyos protagonistas fueron De la Mota y Juanma, quien ensayó el disparo dentro del área, aunque sin mucho acierto; y posteriormente, casi al filo del descanso, tuvo la suya el San Roque de Lepe en una acción de estrategia que culminó con el remate de cabeza de Urko Arroyo, que se escapó por muy poco a la izquierda de la meta defendida por Toni García.
Entre medias, por cierto, tuvo lugar una durísima acción de Carlos, central jiennense, quien debió ver la roja directa por una entrada alevosa, fuera del terreno de juego, sin balón de por medio, sin posibilidad de jugar, por tanto la bola y por detrás a Álvaro González, que se marchaba en solitario hacia la meta rival tras hacerle un precioso túnel al defensa blanco, que se revolvió con esas formas y que el árbitro no consideró como roja directa, cuando ya el jugador local parecía resignado a tomar el camino del túnel de vestuarios.
Así se llegaba al descanso y, la verdad, es que apenas se notaba que Rubén, Oliveira y Álvaro González eran recién llegados. Cada uno en su parcela, demostraron entenderse con el resto de sus compañeros a pesar de que llevan menos de una semana de entrenamientos juntos.
A la vuelta de vestuarios, todo parecía desarrollarse según el guión de la primera mitad, con escasas ocasiones, poca verticalidad de ambos equipos, hasta que pasada la hora de partido el Real Jaén se encontró con el gol, que provino de un rebote que dejó la pelota para Pedrito, quien envió un balón por encima de la defensa lepera, que pidió el fuera de juego con vehemencia ante la ruptura en el desmarque de Cascón, que batió la salida de José Ramón. Una acción muy dudosa pero que no tenía vuelta atrás y que a la postre sería la del triunfo de los locales.
No se rindió el San Roque de Lepe y debutaron con la aurinegra Fran Lepe y Tosan, es decir, el resto de los nuevos que habían sido convocados y uno de ellos, el lepero Fran, tuvo el gol del empate tras una magnífica jugada de Urko Arroyo, quizá el mejor sanrroquista sobre el terreno de juego, que terminó con un centro cruzado al que no llegó el jugador procedente del Sevilla C por muy poco. De hecho, tocó levemente la pelota en el remate y fue obstaculizado por Álex Cruz, aunque sin la fuerza necesaria como para considerarlo algo más que un forcejeo.
Entre medias, el Real Jaén jugaba con el reloj y con la aquiescencia del colegiado, perdía todo el tiempo que era posible. De hecho, sucedió la ridícula situación de que Melgares de Aguilar amonestase a Toni García por pérdida deliberada de tiempo, un tiempo que no se recuperó con posterioridad, beneficiando de esta forma al infractor.
En cualquier caso, y salvo una falta de Adrián que se marchó cerca de la escuadra, el San Roque de Lepe ya no tuvo opciones en el tiempo de añadido de poder sumar algo positivo en Jaén y suma su tercera derrota consecutiva en el Nuevo La Victoria en otras tantas visitas y las tres veces con idéntico marcador.
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