
A nueve puntos de la salvación y con sólo quince puntos en juego de aquí al final de Liga, en Los Ventolines han estado haciendo cuentas en estas dos semanas que han tenido de parón liguero. Uno de ellos ha sido el técnico blanquiazul, José Antonio Rúa, quien ayer expresó su deseo de, al menos, poder mantener la ilusión hasta el final: "Sabemos que todo pasa por ganar en Peñarroya y que suene la flauta en el resto de enfrentamientos que nos influye". En este mismo sentido, el preparador onubense continuó analizando a su rival de este domingo y señaló que la presión, esta vez, puede jugar a favor del Pilas: "No es un campo propicio para hacerse con los tres puntos por lo que vienen demostrando, pero ellos saldrán con muchos nervios porque se juegan sus posibilidades de ascender. Nosotros, sin embargo, jugaremos en una situación similar a la que venimos haciéndolo toda la temporada". Para la cita ante los peñarriblenses, los pileños no podrán contar ni con Soldán, Esteban y Cachola, que están sancionados; ni con Cardellat, Ramón II, Conde y Diego, que continúan lesionados. Pese a ello, esta situación no asusta a Rúa que, en vez de venirse abajo, mostró la confianza en sus pupilos: "Vemos como otros equipos que todavía siguen reforzándose se quejan todas las semanas por las bajas. Nosotros, ahora, tenemos once futbolistas disponibles, y para este partido, tendremos que usar incluso a cadetes, pero yo estoy seguro de que saldremos a por todas, como siempre
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