CAMACHO HABLA EN EUROPASUR

El guardameta de la Real Balompédica José Manuel Camacho ha dado un paso adelante. Consciente de que sus últimas actuaciones -muy especialmente la del pasado domingo frente al Coria en el Municipal (1-3)- no han dejado un buen sabor de boca entre la hinchada, el guardavallas da la cara y no sólo admite que no atraviesa su mejor momento, sino que analiza las causas y se compromete a mejorar, porque se siente en deuda con el club, con el vestuario y con la grada.

-¿Es consciente de que existe un runrún en la afición porque entiende que la Balompédica está encajando últimamente demasiados goles?

-Soy consciente de que mi trabajo es que la portería se quede a cero y de que últimamente no está sucediendo. Todos estamos haciendo lo posible para conseguirlo, porque es un trabajo colectivo y porque tenemos muy claro que en una fase de ascenso es muy importante no encajar goles.

-Puede que ahí es donde resida la preocupación de la grada. ¿Hay tiempo para solventar ese problema para que no suceda durante la liguilla?

-Por supuesto que sí. El míster está haciendo mucho hincapié en ese aspecto, estamos trabajando para eso.

-De los tres goles del pasado domingo ante el Coria, ¿de cuántos se siente responsable Camacho?

-De todos. Soy muy exigente conmigo mismo y no busco excusas. Me rallo mucho con ese asunto. En cada gol veo un error y no paro de darles vueltas de que la solución estaba a mi alcance. En el primero tropecé, pero debería haber despejado antes o sacar al jugador del campo en mi salida. Soy consciente de que tengo que mejorar en ese aspecto.

-Cuando dice en ese aspecto ¿se refiere en realidad a las salidas?

-Efectivamente, a los balones aéreos. Esta temporada no sé por qué, pero no estoy afortunado en ese aspecto y lo sé.

-¿Es una casualidad u obedece a una falta de confianza?

-El asunto de la portería es bastante complicado y en mi opinión es un asunto mental. Llevo muchos años jugando y creo que es una cuestión de confiar en mí mismo. El mister no para de decirme que él confía más en mí que yo mismo y es evidente que eso no puede suceder.

-¿Y a qué se debe eso? Porque la verdad es que se palpa.

-Eso es lo que yo quisiera saber. Es una cuestión de estar convencido, de pensar que soy el de siempre.

-Le hace falta empezar un día, hacer dos paradas y recuperar la autoestima ¿no cree?

-Es muy posible. Blocar un balón, revolear a un tío… y sentirme seguro.

-Lo que resulta curioso es que en los entrenamientos está a buen nivel.

-En los partidos tampoco creo que… el gol de Jerez me la puso por lo alto… De todas formas ya digo que yo me exijo mucho y que sé que hay cosas que corregir. El domingo me llegaron tres veces y me hicieron tres goles y eso no puede ser.

-¿Qué le diría a los que sostiensen que arrastra problemas físicos por la lesión de pubis que sufrió la pasada campaña en Los Barrios y que ése es su problema?

-Eso sólo lo puede pensar alguien que no me ve entrenarme. La temporada pasada no podía ni agacharme ni sacar de puerta y ahora… no hago ni caso a esos comentarios. Yo sé que tengo que dar más de mí, pero no tiene que ver nada con eso. Estoy deseando hacer un gran partido, porque noto que hay mucha gente que me lo están dando todo y necesito corresponder.

-Al margen de su trabajo, a título general ¿se ha dado demasiada importancia a la derrota frente al Coria?

-Demasiada. Hemos perdido cuatro partidos en toda la Liga y quizás haya que darle más valor a todo lo bueno que estamos haciendo y no recalcar tanto lo malo.

-Eso se pasa en cuanto sea oficial la clasificación para la fase de ascenso, algo que incluso podría suceder el próximo domingo.

-Eso esperamos. Vamos a ganar en Huelva y enseguida estaremos hablando de los rivales que nos puedan tocar en la liguilla y los únicos que se acordarán de la victoria del Coria serán ellos, por lo que han supuesto los puntos