Feliz, pero sufrido estreno del Club Deportivo San Roque de Lepe en el nuevo Estadio Ciudad de Lepe, en el que lo mejor ocurrió al final para alegría de los más de 2.000 aficionados que no quisieron perderse una cita para la historia, al igual que quedará para los anales el agónico tanto del pileño Fernando en el último minuto del tiempo reglamentario y que le sabe al equipo aurinegro a gloria bendita. La victoria, que podía también haberse producido con anterioridad, no estuvo exenta de suspense, puesto que el Yeclano también dispuso de alguna ocasión al final para empatar, si bien finalmente se impuso la lógica de la mayor calidad de la plantilla dirigida por Sergio Lobera, que seguirá una jornada más alimentando un sueño que parecía inalcanzable hace no mucho tiempo. El tiempo acompañó, el público, también, y el resultado, lógicamente; así que comienzo de oro en el nuevo coliseo del fútbol lepero.
La primera noticia, aparte del estreno del estadio, fue la vuelta de Pau al once inicial. La segunda, fue el empuje con el que salió el equipo aurinegro al terreno de juego, espoleado por la gente y por las ganas de agradar desde el principio en tan señalado acontecimiento. Así, la primera acción de peligro se produjo a los 5 minutos, en una falta lejana botada por Germán, cuyo disparo durísimo se escapó por centímetros por encima del arco de Fran. 3 minutos más tarde, de nuevo a balón parado, Vidal sacaba el córner y Pereira remataba en buena posición, y la bola pasó más cerca aún de la meta visistante. El Yeclano sufría, tanto con el balón en circulación como en la estrategia.
Las ocasiones más claras de la primera mitad no tardaron mucho en llegar. Dos en apenas dos minutos y no terminaron en gol de milagro. La primera de ellas fue una buena llegada de Jaume hasta la línea de fondo, cuyo centro al segundo palo es rematado de forma impecable por Óscar, obligando a Fran a hacer un paradón; el balón rechazado cayó a los pies de Fernando, que remató bien, pero un defensa se interpuso entre la bola y la red, sacando bajo palos el primer gol. Un minuto más tarde, de nuevo Fernando sacó petróleo de un buen servicio de Óscar, buscando el disparo desde dentro del área y cerca de la meta rival, pero el cuero salió a la derecha de la meta murciana.
Es cierto que pasados esos primeros 20 ó 25 minutos la intensidad del equipo aurinegro pareció decaer bastante, quizá pagando el ímpetu inicial. No es menos cierto que los de Lobera siguieron teniendo la pelota, aunque en zonas más alejadas de las posiciones de peligro. En cualquier caso, de nuevo la asociación entre Óscar y Fernando estuvo a punto de dar sus frutos en el minuto 39, tras un balón diagonal que Óscar dejó para el delantero de Pilas, cuyo disparo se escapó por la línea de fondo, cerca de la portería yeclana. El primer tiempo no dio para más.
A la vuelta de vestuarios, los primeros minutos parecieron desarrollarse a como lo hicieron los iniciales del choque, sobre todo en lo que se refiere a la estrategia; especialmente buena fue la oportunidad en el minuto 61, tras un córner que Fran no acierta a despejar, Óscar busca el disparo, responde el meta visitante y Hornillo caza la bola para rematarla, pero de nuevo un defensa la saca bajo palos. Aún así, fueron los minutos menos buenos del San Roque en el partido y ni siquiera el doble cambio en el minuto 67 dejó sensaciones distintas a las que se dejaban notar con el paso de los minutos, esto es, que el Yeclano defendía cómodamente y los aurinegros no sabían cómo deshacerse de la presión visitante en el centro del campo. La única acción, aislada, de peligro local la tuvo Óscar, muy activo todo el tiempo, pero su disparo frontal no encontró la puerta.
Con el encuentro en su fase más espesa, llegó la expulsión por roja directa de Pereira, si bien esta circunstancia no pesó demasiado en el desarrollo de los acontecimientos. Al contrario, el San Roque empezó a disponer de la bola más tiempo y a intentar llegar con más asiduidad.
El paso de los minutos llegaba la intranquilidad al campo y a la grada, pero nadie dio nada por perdido y al final, un último aliento, alcanzó para ganar los 3 puntos, con 3 grandes ocasiones que, finalmente, dieron sus frutos. La primera de ellas, en el 84, tras una contra magistral conducida por Gabri, cuyo pase llegó a Óscar, que encaró a Fran en el uno contra uno, pero el disparo del delantero se marchó fuera. Perdonó de nuevo el gol en el minuto 87, Óscar penetraba en el área, dejaba el pase de la muerte para Fernando, pero el disparo del pileño a bocajarro no encontró el gol.
Finalmente, en el minuto 89, llegó el premio, aunque en una jugada no tan clara como las anteriores, y contando con la colaboración del meta visitante, que ni atrapó ni despejó un balón caído desde muy arriba, la bola quedó muerta dentro del área, y tras una serie de rechazos, Fernando fue capaz de meter la bota lo suficiente como para introducir el cuero entre los 3 palos, dando el gol de la victoria, el gol esperado, el primer tanto que se celebra en el Ciudad de Lepe. Hecho lo más difícil, tocaba aguantar el último empujón del Yeclano a la desesperada. Tonete tuvo el empate en el último minuto del tiempo añadido, pero afortunadamente para los lepero, su disparo se marchó alto, cuando se encontraba demasiado solo, tan solo que quizá el colegiado, Moreno Hidalgo, demasiado tarjetero para un partido no tan duro, no vio como falta una acción anterior del propio Tonete a Jaume.
En cualquier caso, el partido terminó con el 1-0 reseñado y el San Roque de Lepe continuará una semana más peleando por meterse en los puestos de promoción de ascenso al fútbol profesional. Por tanto, los más de 2.000 aficionados aurinegros se marcharon satisfechos con el resultado, con los puntos y felices de seguir viendo a los suyos en la parte noble de la clasificación.
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