PROBLEMAS PARA PINO ZAMORANO

Alfonso Pino Zamorano, colegiado castellano-manchego, fue denunciado el pasado lunes de madrugada en una comisaría de Valencia, junto a dos personas que lo acompañaban, por insultar gravemente, empujar y zarandear a un supervisor del AVE en que viajaba, hechos que fueron observados por varios usuarios, al punto de que tres de ellos se personan como testigos en la denuncia.

Los hechos ocurrieron en el AVE Sevilla-Valencia que partió de Santa Justa el domingo, 17 de febrero, a las 17:22, y que Pino Zamorano tomó en compañía de un amigo, con negocios de hostelería en Miguelturra, su lugar de residencia, y otra persona, presuntamente uno de los dos jueces de línea que lo había auxiliado esa misma mañana en el partido Recreativo-Racing, que se disputó en el Nuevo Colombino a las doce del mediodía.

Según personal del AVE y varios viajeros, algunos incluso que lo reconocieron, Pino Zamorano y sus acompañantes realizaron gran parte del trayecto en el coche-bar y fue ya cerca de Ciudad Real, su punto de destino, cuando regresaron a sus asientos en el coche 1, de clase turista plus.

Según consta en la denuncia, uno de los acompañantes, el de menor estatura -presuntamente, el juez de línea- se metió en la salita reservada para autoridades, en la que está prohibido entrar, y de la que fue invitado a salir por el supervisor, de 59 años. Minutos más tarde, éste fue encontrado junto a otro de los denunciados de nuevo en la citada sala, de la que volvieron a ser desalojados.

Con el tren ya llegando a Ciudad Real, fueron los tres viajeros los que accedieron a la sala, donde se hallaba el supervisor, y comenzaron a insultarlo, empujarlo y zarandearlo. Uno de ellos, incluso lo cogió de la corbata mientras los otros lo animaban a agredirlo, pudiendo el supervisor salir de la sala e incluso bajar al andén, ya que en ese momento llegaba el tren a Ciudad Real. Pino Zamorano y sus dos acompañantes, uno de ellos con las iniciales F. J. M. A., fueron identificados por una dotación de la Policía Nacional en la propia estación. Incluso, fuentes de la investigación aseguran que las cámaras de la estación podrían haber grabado una persecución al supervisor por el andén.

Éste, al llegar el tren a su destino último, en Valencia, se dirigió a la comisaría Valencia-Abastos, donde puso la correspondiente denuncia por agresiones, insultos y vejaciones.
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