En los primeros compases no hubo dominador claro, sin definirse quién mandaba en el centro del campo y por ello no se producían incursiones que revistieran peligro para ambas porterías. Poco a poco los locales fueron tomándole el pulso al partido, acercándose con mayor mordiente a los dominios de Félix. Sin embargo fueron los algecireños los que gozaron de la primera ocasión y llevaron el susto a la parroquia isleña; finalmente David Lepe solucionó su anterior error con una buena intervención.
No pudo empezar mejor para el Isla la segunda mitad ya que cuando no se había cumplido el primer minuto Cano mete un balón en profundidad sobre Juanjo, que de un gran disparo clava el balón en la meta del Algeciras.En los últimos compases, lejos de atrincherarse atrás, el Isla se volcó sobre la meta rival, haciendo realidad aquello de que la mejor defensa es un buen ataque.
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