El centrocampista uruguayo Pablo Rotundo fue el encargado de abrir el marcador en el minuto 10, lo que propició que el equipo pudiera jugar con mayor tranquilidad para posteriormente abrir diferencias en el tanteador. El futbolista verdiblanco reconoce que "fue una jugada que solemos hacer. Prácticamente me cayó en la cabeza, por lo que sólo tuve que empujarla para dentro. Me puse muy contento porque es mi primer gol de la temporada".
De la misma forma, Pablo incide en la importancia del resultado cosechado, del que reseña que "estábamos confiados en que podíamos sacar este partido adelante y por suerte lo conseguimos. Ya durante la semana estuvimos hablando de la trascendencia de ello, y al haberlo logrado mantenemos las ganas por meternos entre los mejores lo antes posible".
Igualmente, en este derbi el Puerto Real parece haber espantado parte de los fantasmas que le persiguen como visitante, que le hacen bajar el rendimiento. Al respecto, el medio centro charrúa manifiesta que "fuera de casa no habíamos jugado bien últimamente. En otras ocasiones no tuvimos suerte, pero en el encuentro del domingo creo que estuvimos a un buen nivel y de principio a fin dominamos el choque. Esperemos resolver de esta misma manera los partidos que faltan".
Rotundo también aborda el efecto sanador que tiene la victoria de cara a la moral de la plantilla verdiblanca, que andaba un poco tocada. Así, explica que "los partidos ante Mairena, Pozoblanco y San Roque nos dejaron mal en el aspecto psicológico, pero volver al triunfo nos hace crecer la esperanza, además de reforzar la confianza para afrontar con mayores garantías las citas que restan hasta el final".
De igual modo, agrega que "considero que tenemos que ir partido a partido, y no mirar como un todo lo que queda, que es difícil. Pienso que debemos afrontarlo paso a paso y de esta forma creo que podemos alcanzar nuestra meta".
En el capítulo personal, este año no ha gozado de la continuidad de la pasada campaña, a pesar de lo cual comenta que "por suerte esta temporada no he sufrido lesiones, espero que siga la cosa así y, aunque a uno le gustaría jugar siempre, estoy dispuesto a acatar las órdenes del míster para cuando quiera y donde quiera".
Por último, Pablo refrenda su convicción en las posibilidades del equipo y apostilla que "tenemos un buen plantel con buenos jugadores, por lo que estoy convencido de nuestras posibilidades. Ahora sólo resta mejorar fuera de casa, algo que ya hablamos y estamos trabajando para ello".
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