Aunque el hermetismo con respecto al once titular del San Roque resulta evidente, la entrada de Cassiano en el once se antoja como una novedad casi segura. Su velocidad, algo que resultará crucial en la elminiatoria, puede otorgar más mordiente al ataque del cuadro de Ceballos.
Además, Cassiano es un jugador que cae muy bien a banda lo que puede facilitar la incorporación de la segunda línea. El gran problema es la regularidad del delantero que si no inicia con buen pie su participación puede desaparecer del encuentro.
Con este posible cambio, Alejandro Ceballos dejará en el banquillo a Joaquín que, pese a ser un gran delantero, posee menos velocidad que el brasileño. Sea como fuere, lo único importante es que el técnico acierte con el cambio.
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