La Semana pasada, tuve la ocasión, de charlar con Antonio Martínez, entrenador, de la Olímpica valverdeña la pasada temporada. Martínez tiene ganas de entrenar este año y se encuentra con fuerzas, para embarcarse en un nuevo proyecto.
Creo que es buen tío y un gran entrenador, pero, este año se ha equivocado en Valverde. No me meto en sus métodos pero si le sirve de algo, quizás, el salto haya sido demasiado grande de Rosal a Valverde. De ser dios en el banquillo a un don nadie en un vestuario podrido y con futbolistas incapaces de jugar en otro equipo que no fuera este. Por eso desde estas líneas desear todo lo mejor del mundo para el chaval y que tenga mejor suerte en un vestuario no viciado y que no corra el riesgo de darse un batacazo como el de este año.
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