CAE EL SAN ROQUE EN COPA

El San Roque de Lepe cayó ayer eliminado de la Copa del Rey al perder por 1-2 ante el Melilla. Se adelantaron los visitantes con un tanto de Alfonso en propia puerta, pero empató al minuto siguiente Joaquín de penalti. En la segunda parte Yagüe hizo el segundo y el Melilla se quedó con nueve, pero los aurinegros ya no pudieron.




El San Roque acusó ayer el debut oficial en la Copa del Rey ante el Melilla, ya que el conjunto de Alejandro Ceballos no se pareció en absoluto al equipo que ha deslumbrado durante la pretemporada gracias a su desparpajo ante equipos de Primera División como el Athletic de Bilbao o el Zaragoza, o de Segunda como el Betis o el Recreativo.




Sin embargo, ayer las balas ya eran de verdad y el San Roque lo pasó mal, aunque hay que decir que el conjunto aurinegro se enfrentó a un gran rival y se mantuvo en pie y con dignidad, tirando de garra y, sobre todo, gracias a una potente defensa.
La primera parte resultó un partido típico de Copa del Rey, con dos equipos muy bien plantados atrás, lanzando balones largos y buscando profundidad. De hecho, la encontró el Melilla en el minuto 14, con una subida por banda derecha que culmina con un disparo al larguero de Chota, cuyo rechace golpea en Alfonso que, con muy mala fortuna, introduce involuntariamente el esférico dentro de su portería.



Sin embargo, reaccionó inmediatamente el San Roque de Lepe con una contra que terminó en penalti sobre Añete, que recibió dentro del área y cayó, señalando el colegiado una rigurosa pena máxima que permitió al delantero aurinegro Joaquín establecer el empate.




A partir de ahí murió prácticamente la primera parte, en la que el juego brilló por su ausencia y la intensidad fue máxima por parte de ambos conjuntos.
Tras la reanudación, el Melilla compareció con una baja muy sensible, la de Chota, que cayó lesionado al borde del descanso y que estaba manteniendo una lucha de titanes con Hornillos.




El San Roque salió volcado en este segundo acto y a punto estuvo de adelantarse por dos veces, primero por medio de Añete, y después de Vidal. Sin embargo, fue el Melilla el que logró marcar, por medio de Yagüe, enmudeciendo el Municipal.
El tanto visitante cayó como un jarro de agua fría, pero las expulsiones de Manolo y Pablo hicieron que el Melilla se quedara con nueve y se encerrara atrás. A partir de ahí todo fue un acoso y derribo por parte del San Roque, que jugó con más corazón que cabeza y ya no pudo hacer nada para empatar.