Estuve este pasado fin de semana con los chavales, el ratito que echamos, fue de lo más entrañable en un torneo que está creciendo con el paso de los años en Palos.
Dos errores veo en dicho torneo, asumible uno y no tanto el otro por parte de la organización del evento en cuestión de cara al futuro del evento.
El primero de ellos hace referencia a los horarios de semifinales y final que en el rincón de nuestra península en el que nos encontramos a estas alturas me parece una pasada y más tratándose de chavales.
Comento esto por el tema del calor y las fuertes temperaturas que estamos empezando ya a tener en nuestra comunidad autónoma.
El otro hace referencia a los padres entrenadores, que ajenos a la organización y a los banquillos, se les iba la vida dando instrucciones al otro lado de la banda en la que los entrenadores monitores de sus hijos trataban de que los peques desarrollasen su inteligencia primero y después sus habilidades futbolísticas después.
Difícilmente esto se pueda corregir por parte de la organización del torneo que por lo demás ha rayado la perfección ya os digo en un fin de semana extraordinario futbolísticamente hablando.
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