EMPATE LEPERO EN ESTEPONA

Lo tenía ganado, los despistes hicieron que lo tuviera perdido y al final lo empató. El San Roque de Lepe igualó en la tarde del sábado ante el Estepona al término de un partido de resultado incierto en el que fue de menos a más, dominó, sobre todo en la segunda mitad, y en el que al final del choque se sobrepuso al mazazo de los malagueños en los minutos finales, que hace que el equipo lepero siga soñando, sin dejar escapar a sus predecesores en la tabla clasificatoria, pase lo que pase al final de la jornada.




Los primeros minutos estuvieron marcados por el intenso aguacero caído sobre la Costa del Sol y que dejaron el césped sintético del Muñoz Pérez muy espeso. No obstante, el San Roque quiso jugar desde atrás desde el primer minuto, buscando el desgaste del rival, hecho que se dejó notar sobre todo en la segunda parte. El premio a esa propuesta, sobrevino bien pronto, aunque en una jugada a balón parado: falta lateral botada a pierna cambiada por Vidal; entre el vuelo de la pelota y la portería se interpuso Álex Hornillo, que no llegó a tocar el cuero y despistó al meta Ávila, al que la bola le pasó por debajo de las piernas. 0-1 casi en el primer acercamiento, un marcador que los leperos debieron gestionar mejor, si bien el empate llegó en el momento en que los aurinegros jugaban con más comodidad.

Así que, esta vez, el turno le llegó al Estepona: falta lateral sacada por Jonathan y Carlos Arias bate la media salida de Pau, en responsabilidad compartida con la defensa, que hoy se ha mostrado más débil que durante el resto de la liga, donde el San Roque se ha mostrado prácticamente intratable en esta faceta del juego. El gol le dio alas al cuadro costasoleño, que jugó los mejores minutos del partido, agobió al cuadro aurinegro en toda la cancha, por lo que apenas llegó con peligro, a excepción de un disparo a la madera de Hornillo, jugada invalidada por presunto fuera de juego, y otra de Cheli al filo del descanso que desbarató la defensa rival.



Tras el descanso, el San Roque salió con otro aire al partido y tuvo, retuvo la pelota, la circuló con mayor fluidez y rapidez, creándole muchos problemas al rival, juntando las líneas e impidiendo también las acometidas de los locales. Fruto de ello llegó una de las jugadas más bellas del choque, al cuarto de hora de la reanudación, un balón elevado sobre la defensa de Julio de Dios para Cheli, que le ganó la espalda a la zaga y largó un zurdazo impresionante que se estrelló con estrépito en el larguero esteponero. La respuesta rápida del Estepona no se hizo esperar y apenas un minuto después Adrián, el mejor local de largo, servía para Pedro, cuyo disparo a bocajarro tapó Pau en una salida felina a los pies del delantero. Era tiempo para los cambios y, de nuevo, como hace siete días, éstos tuvieron la virtud de reavivar el dominio lepero de la situación. Las acometidas sanrroquistas ganaron en vigor, en peligro, aunque el asistente de Jiménez Moreno cercenó alguna que otra ocasión pintaba muy bien para los leperos.



No obstante, en la recta final del choque, y de nuevo cuando menos lo esperaba el San Roque, el Estepona se puso por delante de nuevo por mediación de una jugada a balón parado. Jonathan amagó el saque, la defensa aurinegra se descompuso, momento que aprovechó el jugador para sacar a la cabeza de Igna, que remató absolutamente solo en el punto de penalti, poniendo la bola fuera del alcance de Pau. Pintaban mal las cosas, pero la fe inquebrantable del equipo lepero salió a la luz en la bota del portugués Pedro Marques, quien controló la bola con el pecho, se acomodó a su pierna derecha y largó un chut espectacular que se coló por la escuadra de la portería de Ávila.

Quedaban 4 minutos, más el tiempo añadido, y el San Roque lo intentó por última vez, pero la defensa local anduvo atenta y el choque no dio para más. Por tanto, un punto para cada equipo que le vale a los leperos para alcanzar en la tabla a Cádiz y Melilla, a la espera del partido de ambos.