SOBRE AFLUENCIA DE PUBLICO

El encuentro que Real Balompédica y Algeciras Club de Fútbol escenificaron el pasado domingo en el Municipal de La Línea correspondía a un partido de Tercera. Pero, de ley, no pertenecía a esa categoría. Al menos en lo que a asistencia de público se refiere. A pesar de que los aficionados rojiblancos no acudieron en gran número al estadio, los medios comarcales coinciden en asegurar que presenciaron el choque "más de seis espectadores". Una cifra sólo superada por cuatro de los once partidos de la Liga Adelante y por uno de los treinta y nueve de la Segunda división B.

El Clásico del Campo de Gibraltar no está precisamente en horas bajas, por mucho que algunos sostengan que el fútbol de la comarca ha caído en desgracia. Más de seis mil almas contemplaron el triunfo sobre su eterno rival del equipo de Pablo Sánchez, que con esta victoria acaricia su presencia en la fase de ascenso.

Desde todos los puntos de España miran con envidia a los dos equipos con más solera del Campo de Gibraltar por su poder de convocatoria. No es de extrañar. Un dato habla por sí mismo: en el Jumilla-Alcalá del grupo IV de Segunda B sólo había… cien aficionados.

En la Liga Adelante consiguieron reunir a más de seis mil personas los duelos Betis-Numancia (35.000), Valladolid-Barcelona B (15.000), UD Las Palmas-Celta (11.846) y Granada-Tenerife (7.000).

Estuvieron por debajo del choque del Municipal nada menos que otros siete partidos, o lo que es lo mismo, el 63 por ciento de los disputados: Recreativo de Huelva-Córdoba (6.000), Girona-Rayo Vallevano (6.000), Salamanca-Elche (5.016), Ponferradina-Xerez Deportivo (5.000), Albacete-Cartagena (3.980), Alcorcón-Huesca (1.500) y Villarreal B-Nástic de Tarragona (1.000).

Los cuatro grupos que componen la Segunda división B y los treinta y nueve encuentros que se disputaron a lo largo del fin de semana no soportan la comparación con uno de los partidos de más tradición de toda Andalucía.

En el grupo I el que más espectadores congregó fue el Guadalajara-Extremadura de Almendralejo. Cuatro mil personas se dieron cita en el Pedro Escartín. En El Val de Alcalá sólo había cuatrocientas.

En el grupo II se encuentra el único partido que alcanzó mayor entrada que el de La Línea, de acuerdo a las cifras facilitadas por las agencias especializadas. El que disputaron en Mendizorroza el exeuropeo Alavés de Vitoria y el Guijuelo: 6.500 personas. El Oviedo-Osasuna B lo presenciaron 5.053 y en Anduva -un campo de grato recuerdo para la parroquia linense porque en él se escenificó el último ascenso de los albinegros- el Mirandés-Real Unión convocó a 3.206. En el Peña Sport Caudal había apenas trescientos.

En el grupo III el Sabadell-Alcoyano sumó 6.105 espectadores, es decir, una cifra muy aproximada a la del Municipal. El Alicante-Sporting Mahonés lo vieron 250 personas.

Por último, en el grupo IV, el que más interés despierta, el Sevilla Atlético-Cádiz reunió a cinco mil aficionados. En el lado contrario, ese Jumilla-Alcalá del que fueron testigos un centenar de personas.