En concreto, los cuatro goles que por el momento ha anotado han permitido a su equipo sumar siete de los diecisiete puntos que ha logrado en las diecisiete jornadas disputadas hasta el momento.
El primero de estos puntos salidos de las botas del joven delantero serón fue el empate logrado en el Príncipe Felipe, en la jornada séptima, cuando Willy marcó el 0-1 en el minuto 76, un tanto que pudo tener un valor triple si Villa no hubiera empatado poco después.
Tres semanas más tarde, el Villanovense derrotó por la mínima al Roquetas en el Romero Cuerda gracias al tanto anotado por este mismo jugador en la recta inicial del segundo tiempo.
Y finalmente, los últimos tres puntos conseguidos por el conjunto verde han sido los del pasado domingo, cuando Willy batió al portero del Lorca con un remate de cabeza.
Al margen de estos tres goles que han valido siete puntos, el máximo goleador del Villanovense, junto a Nico Chietino que también ha marcado cuatro goles (en este caso desde el punto de penalti), también marcó en El Ejido. En aquella ocasión, la diana de Willy apenas sirvió para equilibrar un gol inicial del equipo almeriense, que al final ganó 4-1.
Tras el triunfo del pasado domingo, el jugador no oculta su alegría por volver a ver puerta y porque su gol haya supuesto tres puntos para su equipo. «Estoy muy contento por eso, pero me gustaría sufrir menos para meter los goles. Necesitamos marcar antes para no sufrir tanto».
Y es que, como admite el propio Willy, ante el Lorca las ocasiones de gol se sucedieron constantemente y daba la sensación de que la portería rival era imbatible. «Eso parecía, que no íbamos a marcar nunca, pero al final llegó después de tantas ocasiones como tuvimos».
Una de esas ocasiones claras la tuvo el propio delantero poco antes de marcar el gol, pero el portero le sacó el remate a bocajarro. «Con tantas veces como tiramos a puerta, parecía imposible. El portero yo no sé si se las encontraba o las paraba, pero lo cierto que es que lo paró todo».
Luis Alfonso Ledesma Galán llegó este verano al Villanovense tras jugar el año pasado en el Betis B, después de una temporada en el equipo C. El conjunto verdiblanco le fichó tras su paso por el Rayo B que fue el primer equipo en el que militó tras salir en la temporada 2007-08 del Extremadura, en cuyas categorías inferiores se formó como futbolista.
Se da la circunstancia de que los goles que vienen valiendo su peso en puntos durante las ligas, fueron los que le dieron una plaza en este Villanovense, ya que Willy estuvo a prueba durante toda la pretemporada y destacó por su faceta goleadora durante los amistosos veraniegos.
«Esa es mi idea. Seguir con la misma línea para demostrar que no se confundieron cuando me ficharon en su día y seguir trabajando para seguir esa línea», indica el jugador.
Sin embargo, hoy por hoy, entrar en el equipo tiene la dificultad que salir de él porque, sobre todo con la llegada de Sánchez de la Nieta al banquillo, las rotaciones son habituales. «Todo el equipo está trabajando bien y mientras eso suceda, será más difícil la elección para el míster porque, juegue uno u otro, el equipo lo sigue haciendo bien».
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