Cumple su segunda temporada en el club, y ya puede presumir de formar parte del primer filial del Sevilla FC. A sus 18 años se ha convertido en una de las grandes promesas de la cantera sevillista. Está claro que estamos hablando de Jesús Alfaro, hermano pequeño de Alejandro y aún con ficha de juvenil.
El joven jugador de La Palma del Condado aterrizaba la pasada temporada en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, procedente de una de las canteras con más solera del fútbol onubense, el CCD Siempre Alegres. De allí salieron jugadores emblemáticos como Miguel Pardeza, Patri Rubio o el propio Alejandro Alfaro.
Nada más pisar suelo sevillista, Jesús se incorporó al trabajo del Liga Nacional, lugar donde tan solo permaneció dos semanas, ya que una lesión de Rodri hizo que Ramón Tejada tirará de él para ocupar la delantera del División de Honor. En su primer año conquistó la liga y Copa del Rey, y en el presente curso sumaba cinco dianas, convirtiéndose en uno de los principales estandartes del conjunto de Miguel Ángel Gómez.
El 2010 ha comenzado con fuerza para Jesús Alfaro, ya que desde el día 1 de enero se encuentra entrenando a las órdenes de Diego Rodríguez en las filas del Sevilla Atlético.
El 3 de enero debutaba (además de titular) con el primer filial sevillista ante la UD Marbella, y desde entonces parece ser un fijo para el técnico tinerfeño que lo ha alineado en el once inicial en los tres encuentros en los que ha sido convocado (UD Marbella, R. Betis B y Granada CF).
A pesar de que todo está siendo muy rápido para el jugador, Alfaro se muestra tranquilo, “hay que aprovechar las oportunidades e ir paso a paso. Todo está yendo muy deprisa pero lo importante es tener los pies en el suelo y estar tranquilo”.
Sobre cómo le recibió el vestuario, el atacante palmerino afirmó que “el vestuario me ha recibido con los brazos abiertos. Muchos de sus jugadores ya los conocía, bien del División de Honor o de la Universidad. Existe un vestuario muy unido y estoy convencido de que la recompensa llegará en forma de resultados positivos”.
Por otro lado, Alfaro se refirió al estado actual del Sevilla Atlético. “La derrota en Granada dolió bastante porque merecimos mucho más en nuestro mejor encuentro de la temporada, pero hay que seguir trabajando. Desde el partido con el Betis el equipo está como una moto y eso se nota en los entrenamientos y en la alegría de todo el grupo”.
En cuanto a la posición que ocupará el filial sevillista a finales de curso, el centrocampista aseguró que “el equipo estará en una posición más cómoda. En la primera vuelta se escaparon puntos por falta de experiencia, pero hemos intentado aprender de nuestros propios errores y nos sentimos con la capacidad suficiente como para estar luchando por algo más que la permanencia”.
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